PERÚ (AndeanWire, 01 de Junio de 2016) Si el proyecto de Ley de Exportación de Servicios llega a ser promulgado por el presidente de la República, generará 12 mil millones de dólares en el plazo de 10 años, es decir, 1.000 millones anuales que darán más ingresos para el Fisco e incentivará la creación de más de 300 mil puestos de trabajo directos y 900 mil indirectos.
“Los 12 mil millones de dólares que la exportación de servicios generaría han sido incluidos de alguna manera en las propuestas contenidas en el Plan Nacional de Diversificación Productiva y el Plan Estratégico Nacional Exportador, las cuales estiman que los valores de las exportaciones de servicios se triplicarían en los próximos 10 años. Es sabido que si aumentan las exportaciones también se incrementan los ingresos tributarios”, dijo Mario Mongilardi, presidente de la Cámara de Comercio de Lima, a nombre de los 12 gremios empresariales que están solicitando que el presidente de la República promulgue la ley, que ya ha sido aprobada por el Congreso.
“Invitamos al Ministro de Economía y Finanzas a sustentar el déficit tributario de 1.350 millones de soles anuales que ha dicho que esta ley produciría, ya que hasta noviembre del año pasado el mismo Ministerio estimó erróneamente que eran 771 millones, así como también sería muy interesante que se confirme el gran potencial de crecimiento que tienen las exportaciones de servicios. Los empresarios no queremos confrontación, queremos sumar, queremos el progreso del país. Por eso es muy importante ser escuchados, reunirse y coordinar. Negar un proyecto per se no es una solución para nadie, es aislarse de propuestas constructivas para el país”, añadió Mongilardi.
El Perú es el único país del bloque de la Alianza del Pacífico, integrado adicionalmente por México, Chile y Colombia, que tiene una mínima participación en el sector de exportación de servicios con relación a los otros países miembros del bloque económico. Esto debido a que ellos si tienen regímenes que permiten exportar servicios sin impuestos, mientras que nuestros exportadores compiten en desigualdad de condiciones.
El 1 de mayo entró en vigencia el Protocolo Adicional al Acuerdo Marco de la Alianza del Pacífico, que regula el acceso a mercados, las reglas de origen, la facilitación comercial, las medidas sanitarias y fitosanitarias, los obstáculos técnicos, las compras públicas, la inversión y la exportación de servicios, entre otros aspectos.
En ese mismo protocolo también se identificó el potencial que tienen las exportaciones de software en Perú, México y Chile, así como la importancia de los servicios de comunicación gráfica en México y de los servicios de ingeniería en Perú y Chile.
Igualmente, se definen los mecanismos de apoyo para asegurar que las pequeñas y medianas empresas se beneficien de las oportunidades que ofrece la Alianza del Pacífico, tales como los foros para compartir experiencias y conocimiento entre los empresarios, acceder a mejores políticas públicas entre los gobiernos, así como promover el comercio y el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas que son mayoría en los países miembros de la Alianza.
Hay que recordar que las fortalezas de este bloque están relacionadas con el propósito de conseguir un mejor tratamiento comercial y diplomático en Asia, y hay interés de naciones como Costa Rica, Panamá y Guatemala por vincularse al acuerdo, sin olvidar la curiosidad que han demostrado Canadá y Estados Unidos, que pondrían el puntal para convertir a la Alianza en la más importante del continente.